sábado, 30 de noviembre de 2013

Oportuncrisis.

Este miedo y esta tristeza que parece haber aparecido de pronto en mi vida pero estoy segura que en el fondo la venia arrastrando conmigo pensando en que era algo pasajero no se presenta, como era antes, sin salidas. No pienso que esto es absoluto, que esta no-ganas de hacer van a estar conmigo y no van a poder salir de mi. Si bien me siento un poco triste y sobretodo desorientada creo que voy marcando algunos puntos que quiero cumplir a futuro, es decir, me veo un futuro. 
Lo que me tiene un poco confundida y aturdida es el hecho de que esa sensación no se va de mi. Hay una presión en mi pecho que no parece irse aunque busque una solución concreta, aunque esto sea levantarse y seguir, hay algo en mi que no me deja. Y se vuelve un poco más complicado. 
Me gustaría poder liberarme un poco de todo esto que va pasando por mi mente sin ni siquiera haber pasado. Tengo miedo a un futuro que todavía no se si lo voy a tomar y eso me termina paralizando. 
Tengo proyectos que se que puedo tomar pero me falta perder ese miedo para que mis ganas aparezcan en todo esto.
Me prometí un cambio, lo necesitaba, lo necesito. Prometí saber antes que nadie que era lo que quería sin dejarme guiar por las opiniones y no lo pude lograr y esto va más allá de cualquier exigencia propia, esto lo estaba haciendo por mi bien, por mi, porque creo que estoy dejando pasar momentos oportunos para mi, porque quiero disfrutar mis momentos. 
Busco estar conmigo misma y me voy repeliendo de a poco, necesito amigarme, aceptarme y empezar. No importa si es de cero pero empezar es algo que me va a llevar por un camino que quiero recorrer. Quisiera saber ¿Qué es lo que me falta? ¿Qué es lo que me sobra? Y ¿Por qué no estoy aprovechando esta oportunidad?  

jueves, 28 de noviembre de 2013

Vos sabes señalar pero esperas a que te vean.

Estos días empezaron a ser insoportables para mi, no me siento para nada conforme conmigo misma. No logro quererme ni un poco. No logro aceptarme ni hacerme merecedora de los logros, esos que de a poco voy consiguiendo y que una mínima parte mía quiere que empiece a ver pero es más la negatividad que cualquier otra cosa. Empece a sentir que ya no había metas por cumplir porque básicamente nunca termino cumpliendo las metas que me propongo. 
Se empezó a hacer insoportable esta forma de asumir responsabilidades; esta forma de ver que no hay un fondo en donde parar para lograr repuntar. Sé que lo ideal sería no encontrar el fondo y simplemente empezar a subir pero no puedo, no me sale. Voy cayendo a un vacío y pareciera no frenar, voy por una montaña rusa de emociones donde paso de las alegria a la angustia en segundos y donde esa angustia pareciera no tener final. 
Esta dependencia continua me esta haciendo daño. Este autoboicot no deja de dolerme...Pero ¿por qué no puedo cambiarlo? Lo que más quiero es sentir el cambio y la estabilidad sin embargo pareciera que es mi meta inalcanzable. 
Ya quiero decir ¡Basta! a esta manera de sufrir, de no quererme, de no encontrarme. Pareciera que eso nunca va a pasar, pareciera que al final el rumbo nunca lo termino de encontrar. Siempre hay más para angustiarme pero nunca hay más para lograr acercarme a estar contenta ni siquiera hablo de felicidad. 
Me dan miedo tantas cosas que ya perdí la noción si es coherente tanto miedo. Quiero un cambio y ese cambio me da miedo.
Me gustaría sentir por un tiempo que todavía existe una posibilidad para mi, sentir que la suerte me acompaña en eso que creo hasta imposible. Me gustaría guiarme por mi. 
Me prometí quedarme conmigo y encontré a alguien irreconocible en mi. Alguien al que pareciera que no puedo ayudar. Prometí conocerme, prometí elegirme a mi antes que a todos y esa persona que no quise ver por un tiempo no me gusta para nada pero tampoco sé que hacer para aceptarla. No se ni por donde empezar y ahí empiezan los miedos.
Quiero sentir un cambio, saber que voy por un rumbo, quiero empezar a quererme y aceptarme. No quiero emparchar lo que parece que esta mal, quiero directamente arreglarlo para no tener complicaciones en el futuro ¿Pero cómo hago para ganarme mi propia confianza? Parece algo tan complicado que no puedo ni siquiera pensar en enfrentarlo. Quiero empezar a resolver esto, me gustaría tener ese empujón. 


Y volviendo a mi día a día: me han dejado libre en taller de semiología habiendo ido a todas las clases. Hoy fui a buscar mi nota del segundo parcial, tranquila porque en el peor de los casos iría a recuperatorio, pero si la suerte no podía dejarme más solitaria me encuentro con esto. Indignada y al punto de llorar hablo con el profesor explicando el error que había cometido la profesora de Taller y para comprobar que asistí a todas las clases tengo que ir el sábado a las 11 de la mañana con mi carpeta y la firma de la profesora ¡Espero que la suerte este de mi lado! La suerte y la coherencia. 
También como novedad esta la posibilidad de cambiarme a Historia. Dejar Psicología por Historia seria cambiar mi rumbo, un poco mi destino, saber que hay algo más allá. En febrero confirmo. 
Necesito una vuelta del destino, de eso no hay dudas. 
  

viernes, 22 de noviembre de 2013

De ma-ma-ma-ma-gica.

Después de un tiempo ausente por el blog hoy vuelvo a escribir, con buenas noticias, con algunas malas y hasta nuevas sensaciones. 
Contenta por haber aprobado taller de semiología y esperando con ansias que también tenga una buena nota el segundo parcial de semiología. Contenta por abandonar, aunque suene raro, una materia que me angustiaba mucho más de lo que podía soportar. Contenta porque tome decisiones, cosa que antes no hubiera pasado. Antes solo me hubiera paralizado. Hoy podría decir que me siento libre.
Oficialmente empece con mi nueva pyme: Hanna (invito a todas a pasar). 
Es un proyecto que de a poco me ayuda a independizarme económicamente de mi familia, que es básicamente por lo que tuve la incentiva. Se que lleva tiempo pero es algo que me alegra, empezar a sentirme independiente, es una sensación que quiero sentir. La venta de ropa por internet casi se esta volviendo algo común pero me gustaría marcar la diferencia en esto. El saber que más allá de la ropa, lo hago por mi, por adaptarme a un trabajo es también lo que me incentiva a lanzarme en esto. 
Además, ya estoy en vacaciones y tengo tiempo para disfrutar de esas cosas que me gustan como mirar películas, salir, ir disfrutando de algunas salidas que me quedaron pendientes como algunos museos y otros lugares ¡que espero ir mostrando!
Espero volver con más novedades. Una cena armada por mi mamá con sus amigas, mi familia y demás me espera. Saludos y ¡Feliz día de la música! 

jueves, 14 de noviembre de 2013

Termina siendo más de lo mismo y sin embargo te busco. Termina siendo más de la mismo y sin embargo creo que todavía hay una esperanza para nosotros. Termina siendo más de lo mismo y me voy perdiendo cada día más. Termina siendo más de lo mismo y no entiendo qué es lo que me lleva a buscarte. Termina siendo más de lo mismo y sin embargo me encierro en vos. 
¿Hasta cuando va a ser así? ¿Cuál es nuestro límite? ¿Es qué yo espero más de lo que el amor puede dar? ¿Tengo idealizada la forma de dar amor que no puedo conformarme con lo que pueden hacer por mi? 
Todo va a terminar siendo más de lo mismo. Tenerte cerca pero a la vez lejos se va a transformar en nuestra forma de amar. Y esto nos hace mal, no daña pero, como siempre, termina siendo más de lo mismo.  

martes, 12 de noviembre de 2013

Pintaron los diablitos y yo.

Uno a veces tiene pensamientos y sentimientos pre parcial que parecen que van a durar para siempre. El no sirvo para esto aparece bastante antes de alguna situación que me genera ansiedad y miedo. Esa frase casi que la uso para escudarme si me llegará a ir mal. Yo dije que no servía, casi como un el que avisa no traiciona que me permite ponerle un freno a ese sentimiento de frustración. 
El lunes antes del parcial por mi cabeza pasaban este tipo de pensamientos, se hacían cada vez más concretos. Yo debería haber frenado un poco antes de encaminarme en esto de carrera universitaria, tengo ganas de parar, al final no estoy disfrutando nada. Si bien entendía que estaba bastante ansiosa por el parcial también entendía la posibilidad de frenar como algo a lo que podía llegar sin sentir que se me derrumbara todo el esquema en mi cabeza de lo que sería "mi vida perfecta".
Paso el parcial, paso la ansiedad, los nervios y el pensamiento deberías frenar seguía ahí presente. Me senté en uno de los escalones altos que dan a un especie de patio central del pabellón a pensar un poco. Necesitaba acomodar las ideas. Y si, ahí seguí una y otra vez esa sensación.  
Sentí que tenia 20 años y no estaba disfrutando nada, no disfrutaba mi vida que al fin era lo único que tenia, algo que es único y que no puede pertenecer a nadie más, es algo tan importante que el hecho de llamarlo "algo" me retumba en mi cabeza, quisiera ponerle otro título pero me nublo al pensar qué nombre podría ponerle. Estaba desperdiciando mi tiempo, ese que sé que no vuelve atrás por más que lo deseé. Estaba en un lugar que hasta me parecía ajeno y la pregunta ¿Qué hago parada acá? 
Este planteo que aparecía en mi cabeza tenia ganas de que haga algo al respecto. Hacer lo que quería y no lo que debía hacer porque los demás lo esperaban. Si yo deseaba tomarme, como me gusta llamarlo, un cuatrimestre sabático ¿Cuál era el problema? Tengo que correr ese riesgo, es mi riesgo. 
Y así aunque me fue bien en las materias tengo pensado relajarme un poco. Esto no quiere decir que abandono todo, tengo un parcial más que rendir y unos finales que no voy a dejar pasar. Voy a rendirlos pero por el momento eso es todo lo facultativo que voy a hacer. Necesito encontrarme para saber que es lo que quiero. En mi cabeza no se plantea la carrera que elegí, se plantea la forma en la que estoy asumiendo esa nueva etapa. 
En muchos aspectos tengo ganas de ganar seguridad, de aprender a aceptar mis decisiones, de saber bien quién soy y que papel represento y cuál es el que quiero cumplir a partir de ahora. 
Tampoco es que este tiempo para mi me va a encontrar haciendo nada, a lo que respecta trabajo tengo planeado una -¿podré llamarla pyme?- como ya conté en otras entradas que por cábala no lo estoy contando tanto. 
Y el tiempo me dirá por donde me llevará esos seis, casi siete, meses sabáticos. Tengo algo claro y es que a la UBA quiero volver porque sé que ese lugar es para mi también se que la carrera es para mi, sólo que estamos en tiempos distintos. Es por eso que medí mi tiempo para encontrarme. 

Gracias por los comentarios, cada vez que me suena el celular y es un mail avisando que alguien que contesto me alegra mucho que estén del otro lado ayudando. Muchisimas gracias. 

jueves, 7 de noviembre de 2013

Y hoy decidimos parar acá, no vamos para el mismo lugar.

Y hoy te vas y yo me quedo acá esperando que la lluvia te acerque un poco más a mi. ¿Cuántas veces te fuiste e igual pude seguir? ¿Cuántas veces volviste y también pude seguir? Porque en eso se baso todo el tiempo: en seguir igual a pesar de tus decisiones. 
Pude seguir a pesar de que no querías volver a verme, a pesar de decirme no amarme más. Y pude volver cuando dijiste que no te habías podido olvidar de mi, dejando atrás todas esas cosas que dijiste que sabemos que no se pueden borrar. Dejando atrás ese nuevo comienzo de vida que se me acercaba, solo por vos. 
Confíe en tus palabras, te equivocaste y me lastimaste. Me equivoque y te lastime. Seguí. Seguimos. Y ahora decidiste frenar acá. Y ahora se supone que yo tengo que pasar por esto, otra vez. Ya lo viví, ya se que es lo no tenerte a mi lado, sé como pasarlo.
Esta tristeza no es porque hoy decidiste darle un fin a nuestros proyectos, un fin a un amor que había sobrevivido a tantas cosas que parecía invencible. Hoy la tristeza es porque no se puede volver más de un amor así, hoy esto no puede ser algo que en algún puede tener una esperanza, hoy este amor tiene un punto final. Hoy la tristeza es porque ahora yo también tengo que darle un final.  

domingo, 3 de noviembre de 2013

Relación ambiente-fenotipo.

Hoy mientras volvía a mi casa caminando por la calle Florida, pleno centro de Buenos Aires, a eso de las 7 de la mañana y la veía tan desierta. tan vacía pero a la vez linda. Mientras cruzaba la Plaza San Martín para poder llegar a la estación de Retiro más me gustaba ver ese paisaje. Sólo pero a la vez con ganas de estar ahí, respirando un poco de la paz de la ciudad. 
Llegamos al tren estábamos bastantes cansados por una noche, de esas que hace tiempo que no pasábamos  mi novio y mi mejor amiga sentados- o casi desparramados- en los asientos del tren. Esperábamos a que arranque y yo miraba por la ventana como de a poco empezaba a salir el sol, las nubes hasta veía los primeros movimientos de las personas a esa hora. 
Pensaba y llegaba a la reflexión sobre muchas novedades que llegaron a mi vida y la forma en que pasaron casi por inercia sin sentir de verdad que pasaba. Por un momento sentí que había desperdiciado mi tiempo. ¿Cuántas cosas viví y todavía no había tomado noción? 
Pase de ir al colegio, con mi uniforme, con mis carpeta Nº3, con mis horarios, con mis faltas calculadas como si fuera una cuenta matemática a pasar a la facultad, a la UBA donde yo me tengo que organizar, donde mis horarios pueden variar de una etapa del año a la otra, donde no tengo nadie que me diga Hoy no faltes, te vas a quedar libre sino que tengo que estar yo pensando que es lo que más me conviene si faltar para quedarme estudiando en mi casa o ir para aprovechar la clase para hacer consultas o incluso tomarme ese día porque me siento totalmente agotada y cansada. De alguna forma me dio cierta independencia que no supe sentirla, lo viví como algo natural porque todos están pasando por esta etapa pero aunque todos esten pasando por esa etapa ¿Por qué no pude sentirme diferente al resto? ¿Valorarla de otra forma? 
Esa pregunta y otras miles más empezaron a formarse en mi cabeza - y no fueron algunos efectos del alcohol, esto lo estaba pensando por mi- Sentí que viví todo desde un punto donde me guiaba por los demás. El hecho de ver como los demás iban tomando sus nuevos rumbos yo los vivía. Creo que muy pocas veces me puse a pensar que era lo que sentía o me pasaba o incluso que quería hacer. Estaba por el otro decidiendo sobre mi. Y ya no quiero eso. 
Logre una independencia que ni siquiera pude sentirla a mi manera. No quiero seguir perdiendo(me) ahora llegue yo a vivir mi vida. 

Todo esto puede que me lleve a un lugar más individualista de mi vida, necesito saber que antes que necesitar a alguien más tengo que necesitarme y confiar en mi. Siento que es la base para equilibrar el afuera. Saber que el desequilibro externo no puede modificar el interno, casi una relación ambiente-fenotipo- términos que aprendí en biología que creo que nunca se me van a borrar- 
Quiero ponerme a pensar si cada paso que voy dando es lo que quiero hacer y dejar de guiarme por el resto. Quiero disfrutar estos momentos porque son solo míos y de nadie más. 

Entre las novedades de la semana y a futuro podría contarles que el miércoles tengo un parcial y una entrega de carpetas para el taller de semiología, con la cual me estoy preparando estos días aprovechando las noches para estudiar. Finalmente voy a empezar el gimnasio. Me quedan 20 días de cuatrimestre dónde todo el esfuerzo iría concentrado sólo a los libros. Me da cierto alivio el saber que faltan pocos días. 

A empezar la semana estudiando.